Se trata de un cambio automático, en el que los consumidores no tendrán que realizar ningún tipo de modificación, sino que se encargarán las compañías eléctricas.
Con la llegada del nuevo año, a partir del 1 de enero de 2024, entraba en vigor la nueva fórmula de cálculo o del Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC), la tarifa eléctrica regulada. Se trata de un cambio automático, en el que los consumidores no tendrán que realizar ningún tipo de modificación, sino que se encargarán las compañías eléctricas, que aplicarán dicha fórmula de precio de la energía en las facturas emitidas a partir de ayer.
Aproximadamente, son 8,5 millones de consumidores los que están acogidos a la tarifa regulada -un tercio de los hogares-. Esta nueva fórmula incorporará, parcialmente, las señales de precio a largo plazo. Hasta ahora, el precio final estaba indexado al mercado mayorista diario.
Con el fin de incorporar señales de precio a largo plazo, desde el pasado 1 de julio de 2023, las comercializadoras de referencia han ido adquiriendo a plazo parte de la energía que la tarifa PVPC consumirá en 2024.
Impulso a la contratación de electricidad
Esta modificación supondrá un impulso a la contratación de electricidad en los mercados a plazo, según indican desde el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO). Este impulso se traducirá en una “mayor estabilidad en las facturas de hogares y micropymes, evitando episodios de fuerte volatilidad”.
De esta manera, la factura de los hogares se beneficiará de la desindexación parcial de los mercados al contado al incorporar referencias de los mercados de futuros. Esta incorporación será gradual, representando el 25 % en 2024, el 40 % en 2025 y el 55 % en 2026.
Los consumidores con tarifa regulada pagaron un 40% menos en 2023
Pese a los elevados precios de la electricidad en los mercados mayoristas en 2023, el consumidor tipo, con un consumo de 2.400 kWh/año y una potencia contratada de 4,11 kW, han visto reducida su factura en un 40,5 % interanual. En esta línea, mientras que la factura mensual de 2022 se situó en los 75,58 euros, de medio, ese importe se redujo hasta los 44,97 euros en 2023.