El director de CREARA Energy Experts, una de las cinco primeras empresas acreditadas como Sujeto Delegado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, analiza la evolución, la importancia y las limitaciones del Sistema de Certificados de Ahorro Energético.
El sistema de Certificado de Ahorro Energético (CAE) es una herramienta que ayuda a promover la eficiencia energética de las empresas. Con este certificado se pretende, a nivel administrativo, alcanzar los objetivos comprometidos con Europa para 2030. No obstante, “el arranque está siendo un poco lento por falta de conocimiento, por lo que es importante divulgar acerca de este mecanismo y sus ventajas”.
Así nos lo traslada al área de Material Eléctrico de C de Comunicación Rodrigo Morell, director de CREARA Energy Experts, una de las cinco primeras empresas acreditadas como ‘Sujeto Delegado’ por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
¿Qué valoración hace del sistema CAE?
Es un modelo novedoso y prometedor, además de una herramienta muy potente para promover la eficiencia energética, por varios motivos. Se trata de un sistema duradero, pensado a largo plazo, que se financia con fondos privados y no depende de la disponibilidad de fondos públicos y/o subvenciones.
Su funcionamiento, además, es ágil, porque los Sujetos Obligados tienen que liquidar su deuda con el Fondo Nacional de Eficiencia Energética trimestralmente, lo que les obliga a encontrar CAEs que les permitan cumplir con sus obligaciones.
También es atractivo para las empresas ahorradoras porque el ingreso que obtienen por la venta de los CAEs puede cubrir un porcentaje importante de la inversión en medidas de eficiencia energética.
Por último, es fiable puesto que permite a las mencionadas empresas planificar las inversiones con la seguridad de que van a recibir la contraprestación por la venta de los CAE, sin la incertidumbre que suponen, por ejemplo, las subvenciones.
¿Cómo han vivido desde CREARA la evolución de sistema CAE en este tiempo?
Los agentes que intervienen en el mercado energético están mostrando mucho interés. De momento, el número de Sujetos Delegados y de Verificadoras acreditadas por el Ministerio es limitado, pero irá creciendo porque cada vez son más las empresas que nos preguntan cómo funciona el sistema. El arranque está siendo un poco lento por falta de conocimiento, por eso lo importante ahora es divulgar acerca de este mecanismo y sus ventajas.
“La relevancia del sistema se fundamenta en que se va a acelerar la inversión en tecnología más eficiente”
¿Qué supone para una empresa obtener el Certificado de Ahorro Energético?
Desde la perspectiva del que invierte en ahorro, la relevancia del sistema se fundamenta en que se va a acelerar la inversión en tecnología más eficiente, ya que al monetizar el ahorro a través del Sistema CAE, dicha inversión es mucho más rentable. Por tanto, va a dinamizar el mercado de la eficiencia energética y a muchas tecnologías como la aerotermia, el led, los sistemas de recuperación de calor, etcétera.
¿Hay verdadero interés?
Por parte de la Administración sí, porque es una forma de alcanzar los objetivos comprometidos con Europa para 2030. Pero es que, además, este sistema es interesante para quienes lo van a financiar (los Sujetos Obligados), porque si consiguen los CAE a un coste inferior a la equivalencia financiera marcada por el Gobierno, pueden ahorrar a la vez que cumplen con su obligación con el Fondo Nacional de Eficiencia Energética.
¿Cómo inicia el proceso?
El proyecto arranca con la firma del convenio CAE entre el Usuario Final y el Sujeto Delegado. En este, se debe especificar la cantidad de ahorro estimado y la contraprestación que recibirá el Usuario Final por ceder su ahorro. La ejecución de la actuación de ahorro podría haberse ejecutado antes de la firma del convenio.
¿Cómo actúa el Sujeto Delegado?
El Sujeto Delegado prepara toda la documentación necesaria para la verificación de la actuación y la solicitud de la emisión de los CAE, como parte de la elaboración del expediente.
La normativa establece que el Sujeto Delegado debe contratar un verificador independiente para validar la actuación de ahorro y la documentación requerida para el proceso.
Después, el Sujeto Delegado debe presentar la solicitud de emisión de CAE al Gestor Autonómico. Éste revisará y, si está todo correcto, dará el visto bueno al expediente CAE y emitirá el número de registro correspondiente. Se realizará además la preinscripción en el Registro Nacional.
“La principal limitación es que el sistema está arrancando: los verificadores están aprendiendo a interpretar todas las casuísticas que se pueden dar”
¿Cuándo sabe el solicitante que el certificado ha sido inscrito y cómo finaliza el ciclo CAE?
El Coordinador Nacional del Sistema CAE se ocupa de la inscripción definitiva del certificado en el Registro Nacional y se le comunica al solicitante. Los CAE ya emitidos se venden a un agente autorizado o se liquidan en el sistema para su monetización. Esto es competencia exclusiva del Sujeto Delegado, tal y como se establece en la normativa. El ciclo CAE termina con el abono de la contraprestación acordada al Usuario Final por parte del Sujeto Delegado.
¿Qué limitaciones o barreras han experimentado a la hora de gestionar los CAEs y qué posibles soluciones se les ocurren?
La principal limitación es que el sistema está arrancando: los verificadores están aprendiendo a interpretar todas las casuísticas que se pueden dar y la Administración está haciendo las verificaciones de los primeros registros CAEs. Aún así, el sistema parece prometedor y se irá desarrollando según lo vayan conociendo más agentes.
