El salón elabora el "Informe Construmat sobre el Impacto Económico y Social de la Rehabilitación de Vivienda".
La 18ª edición de Construmat, salón organizado por Fira de
Barcelona entre los días 21 y 24 de mayo en el recinto de Gran Via, tiene en la rehabilitación el gran eje temático que recorre todo el certamen, sobre todo después de la aprobación del Plan Estatal
de Fomento del Alquiler de Viviendas, Rehabilitación, Regeneración y Renovación
Urbana 2013-1016. El consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataluña, Santi Vila; el alcalde de Barcelona, Xavier Trías; y el presidente de Construmat, Josep Miarnau, inauguran oficialmente Construmat 2013 el día 21 por la tarde.
“Construmat es consciente de que la rehabilitación es una
de las grandes oportunidades de negocio en el mercado nacional para las empresas
de la construcción españolas”, ha explicado Pilar Navarro, directora del salón.
En la edición de 2013, la rehabilitación contará con sesiones específicas en el marco de la
primera edición del Building Solutions World Congress, un congreso de
construcción y arquitectura contemporánea que presentará todo tipo de
soluciones para hacer frente al difícil momento actual.
Asimismo, el salón ofrece a partir de mañana jornadas y sesiones sobre
esta temática, entre las que destacan las organizadas por el Instituto Catalán
de la Energía (ICAEN) sobre Certificación Energética y Rehabilitación de
Edificios y por el Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la
Generalitat de Cataluña, que presentará su estrategia para la renovación
energética de todos los edificios catalanes, en aplicación de la Directiva
Europea de Eficiencia Energética de octubre de 2012.
Informe Construmat sobre Rehabilitación
La organización ha dado a conocer el “Informe Construmat sobre el Impacto Económico y Social de la
Rehabilitación de Vivienda”, que refleja que en España por cada euro invertido en este sector se genera un 85% de actividad económica adicional. Este documento
elaborado por el salón barcelonés concluye que las ayudas a la rehabilitación
tienen un saldo positivo para las Administraciones: por cada 100 euros que
destinan a subvencionar actuaciones de mejora en los edificios se recuperan, vía
impuestos, 111 euros.