En este post, voy a detallar las ventajas que ofrecen los paneles fotovoltaicos de tejas frente a los convencionales. Básicamente, son las siguientes:
1. Mayor producción de energía
Las células solares en tejado no necesitan barras colectoras en la parte superior de los dispositivos, por lo que se ilumina una mayor cantidad de superficie de la célula solar y, por lo tanto, la mayor parte de las células solares queda expuesta a la luz solar.
Las células no necesitan estar separadas entre sí como en los paneles solares convencionales, por lo que toda la superficie del panel es “superficie útil”, aumentando la producción de energía por metro cuadrado de panel. La imagen lo muestra:
Como ya vimos en otro post, los paneles solares convencionales tienen las células individuales conectadas en serie, por lo que, cuando una parte del panel solar está a la sombra, puede tener un efecto significativo en el nivel de producción de energía.
Al configurar las células solares en tejas, pueden cablearse en grupos y configurarse en paralelo, lo que reduce significativamente las pérdidas causadas por el sombreado. Además, el uso de paneles de tejas fotovoltaicas reduce enormemente las pérdidas óhmicas, ya que la corriente es menor (lo que también mejora el rendimiento térmico) que en las cadenas tradicionales conectadas por cinta.
2. Mayor tolerancia a la sombra
Las pruebas a la sombra en exteriores durante un período de varios meses han demostrado que el panel solar de tejas fotovoltaicas rinde entre un 35 % y un 45 % más que los diseños de paneles solares convencionales.
3. Mayor fiabilidad
Los paneles solares de tejas eliminan los aproximadamente 30 metros de barras colectoras y uniones soldadas que requieren los paneles solares convencionales, por lo que se reducen drásticamente los fallos de conexión que puedan producirse en las barras colectoras.
4. Excelente rendimiento mecánico
La resistencia del módulo frente a fuerzas externas (como el viento y la nieve) es un aspecto importante cuando se trata de la fiabilidad de cualquier panel solar. Por ello, las pruebas de carga de los módulos fotovoltaicos son imprescindibles en el proceso de fabricación.
Según diversas pruebas estáticas y dinámicas de carga mecánica, este tipo de paneles son más resistentes a los fallos causados por las fuerzas externas que se aplican al panel en comparación con los construidos con células solares convencionales. Por ejemplo, mientras que un módulo convencional de media célula presenta algunas microfisuras y una ligera pérdida de potencia de alrededor del 1 % cuando se prueba mediante una carga positiva de 5.400 Pa, las células solares de teja fotovoltaica no presentan atenuación de potencia ni microfisuras tras la misma prueba.
5. Estéticamente más atractivo
Aunque esta siempre es una cuestión subjetiva, los paneles solares de teja fotovoltaica no tienen circuitos de conexión entre células visible, lo que les confiere un aspecto limpio y sencillo que resulta más atractivo en comparación con los paneles convencionales.
En resumen, los módulos de teja fotovoltaica son probablemente el límite del desarrollo del silicio cristalino aplicado a dispositivos fotovoltaicos. Sin la introducción de procesos de doble unión, como con la tecnología de heterounión que combina silicio cristalino con silicio amorfo de lámina delgada para producir una célula híbrida de alta potencia, o con células IBC, un módulo de tejas proporciona la máxima potencia y eficiencia que se puede obtener con silicio cristalino tradicional no dopado.
Las pruebas de fiabilidad de los módulos fotovoltaicos demuestran que los paneles solares de tejas ofrecen una tecnología más robusta en comparación con los módulos convencionales en términos de sombreado, resistencia mecánica, conexiones adecuadas, bajas corrientes, etc.
