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Gilen Xabier, el instalador versátil que demuestra que nunca es tarde para apostar por los oficios técnicos
Gilen Xabier Fernández es actor e instalador electricista.

Gilen Xabier, el instalador versátil que demuestra que nunca es tarde para apostar por los oficios técnicos

Por Lola SánchezResponsable de Contenidos del Área de Material Eléctrico
Aventurero, Youtuber y actor, Gilen Xabier rompe con los estereotipos tradicionales y nos acompaña en su viaje personal hasta llegar al sector de las instalaciones eléctricas: “Me gustaría seguir creciendo como profesional para abarcar mayores proyectos y ofrecer un mejor servicio”.

Pasión. Ambición. Profesionalidad. Compromiso. Entrega. Superación. Son incontables las historias de talento que se esconden tras los rostros de los instaladores e instaladoras que se esfuerzan cada día por construir una sociedad más electrificada, inteligente y conectada. Miles de autobiografías y memorias que guardan toda una vida y que mueven los engranajes del sector de material eléctrico.

Esta historia de talento viaja hasta Barakaldo (Vizcaya) de la mano de Gilen Xabier Fernández, instalador electricista. A los cuatro años de edad, su familia se mudó a Pamplona, ciudad en la que vivió algunos de sus mejores y peores momentos.

“Mi padre acabó en política como senador por Navarra. Eran tiempos difíciles a causa del movimiento nacionalista vasco, por lo que pasó a ser objetivo de ETA debido a su implicación en la lucha antiterrorista. Como la amenaza no cesaba y teníamos que movernos con escolta, huimos a Málaga, donde pasé 25 años de mi vida. Fue algo que me marcó y tuvo una fuerte repercusión en el forjado de mi personalidad y carácter”, rememora el protagonista.

Y continúa: “Cuando era joven, no era buen estudiante y me costaba mantener la concentración en clase. Pese a que obtuve parte de mi educación en un colegio de curas, los Hermanos Maristas, el nivel de exigencia era altísimo y no destacaba por mi falta de motivación, lo que me empujó a terminar en la escuela pública. Es curioso que tan solo estaba concentrado en pretecnología, una asignatura optativa”.

Sin un rumbo fijo que seguir, Gilen aprobó la selectividad y se decantó por cursar filología inglesa: “Fue un error y, de hecho, dejé la carrera a los pocos meses porque no tenía vocación ni interés. En años anteriores, me había planteado optar a la Formación Profesional, pero dichos estudios no estaban bien vistos en esa época. Allí solían acabar los jóvenes más conflictivos y la mayoría de las familias querían que sus hijos fueran a la universidad”, explica.

Finalmente, sus padres le dieron la oportunidad de perseguir uno de sus grandes sueños: ser actor. Tras completar los estudios de interpretación en la Escuela de Arte Dramático y ejercer múltiples oficios, Gilen tuvo la suerte de participar en un casting para la serie de televisión El Príncipe, donde desempeñó un papel secundario (El Tripas) que le otorgó cierta proyección profesional.

“Después de dos años, tomé la decisión de irme a Madrid para probar suerte como artista. Sin embargo, el mundo audiovisual es complejo y, si bien trabajé en diferentes series de televisión, no conseguí triunfar en el campo de la interpretación a nivel actoral”, reflexiona.

Química instantánea con el mundo de la electricidad

El tiempo pasó y la vida guió a Gilen hasta Zamora. Capricho del destino o mera casualidad, una casa que necesitaba ser restaurada fue su puerta de entrada al mundo eléctrico.

“Descubrí mi vocación por la instalación con aquella reforma. Justo en aquel momento iba a impartirse un curso de electricidad en baja tensión en Zamora, al cual me inscribí. No obstante, la formación fue decepcionante y no cumplía con las expectativas, así que me preparé por mi cuenta y compré material profesional para investigar todo lo que era necesario en un buen electricista”, argumenta.

Mientras cursaba los estudios de electricidad, dio un paso más y se aventuró en YouTube con su propio canal (Gilen Electric). Sin esperarlo, el número de suscriptores comenzó a subir como la espuma, lo que le motivó a seguir creando contenido e indagando para elaborar nuevos vídeos día tras día.

“Cuando acabé el curso, me saqué el carné de instalador autorizado, me di de alta como autónomo y volví a Madrid. En la actualidad, compagino la gestión de mi canal con colaboraciones en una empresa de multiservicios, mientras atiendo a mi propia cartera de clientes. La idea es crecer como profesional y, más adelante, poder contratar a algún otro trabajador para abarcar mayores proyectos y ofrecer un mejor servicio”, matiza.

Personalmente, las instalaciones con las que más disfruta son las averías, “ya que te obligan a darle al coco”, bromea, y prosigue: “Las labores de investigación para localizar fallos eléctricos y aportar soluciones son las más interesantes. Bajo mi punto de vista, ahí es donde pocos electricistas marcan la diferencia”.

Gilen Xabier cuenta con su propio canal en YouTube (Gilen Electric).

La innovación inherente al universo eléctrico es otra de las palancas que impulsa a los profesionales a actualizarse y estar al corriente de las últimas novedades. “Existen multitud de posibilidades para cada trabajo que se quiera acometer, lo cual posibilita brindar infinidad de opciones y alternativas a los clientes”, señala.

En este escenario, considera que una de las principales tendencias vigentes es la automatización, especialmente en el ámbito de la domótica, impulsada por la creciente demanda de sistemas inteligentes en hogares y empresas. Del mismo modo, alude a otras industrias en expansión, como la eficiencia energética, las energías renovables y el vehículo eléctrico.

“El sector de las instalaciones eléctricas está en constante evolución, pero también enfrenta desafíos relevantes como la escasez de técnicos cualificados, lo que provoca retrasos, sobrecarga de trabajo y pérdida de calidad; el rápido avance de la tecnología y las normativas cambiantes; el intrusismo laboral, que impacta en los precios del mercado y pone en riesgo la seguridad de las instalaciones; los problemas puntuales de stock derivados de la logística o la geopolítica; y la gran presión actual por la sostenibilidad”, sostiene.

Amante de la aventura y la rigurosidad

Polifacético y de espíritu aventurero, Gilen disfruta de la música, los viajes en moto, el deporte, el submarinismo y el aeromodelismo. “Soy un alma inquieta, a pesar de que me falta tiempo para poder disfrutar de todas mis aficiones”, confiesa.

A la hora de brillar en un mercado tan competitivo como el actual, asegura que el conocimiento técnico, la habilidad manual y la atención al detalle son aptitudes fundamentales que no pueden faltar en un buen instalador autorizado, así como la capacidad de resolución de problemas o la competencia comunicativa. “Igualmente, la destreza física juega un papel clave en la ejecución de ciertas tareas, puesto que hay que trabajar en lugares incómodos o cargar materiales y equipo pesado”, añade.

Gilen Xabier se define como un alma inquieta y un gran aventurero.

En relación a la evolución del sector en España, tiene claro que la automatización y la sostenibilidad marcarán la hoja de ruta del instalador del futuro, que será más técnico, más verde, más digital y más especializado. A su vez, reivindica que el género no está reñido con la electricidad y anima a las mujeres a decantarse por los oficios técnicos y las carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas).

“Si miro hacia el futuro, me imagino trabajando en lo que realmente me apasiona, con un local propio que funcione como oficina, almacén y espacio creativo donde poder investigar, desarrollar proyectos e impartir formaciones a nuevos amantes de la electricidad. También me gustaría continuar compartiendo mis experiencias y aventuras en mi canal de YouTube a través de contenidos cercanos, amenos y accesibles para todos”, desvela.

Como broche final, a su yo del pasado le aconsejaría que disfrutara de la vida, que es muy corta, y que aprovechara cada minuto para lograr un mayor crecimiento personal y laboral. “También le diría que el dinero no lo es todo y que lo verdaderamente importante es crear momentos inolvidables con la familia, la pareja y los amigos. Y, para ello, hay que saber buscar el equilibrio entre el tiempo que se dedica a la profesión y al entretenimiento”, concluye.

En Hager, impulsan historias como la de Gilen Xabier. La compañía apuesta por el talento sin importar el género, promoviendo la inclusión para crear un entorno donde todos puedan crecer y contribuir a un futuro con instalaciones eléctricas más eficientes, sostenibles e inteligentes. Además, valorar las experiencias de los instaladores y escuchar sus necesidades para desarrollar soluciones innovadoras y seguras que faciliten el día a día es parte de su ADN.

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