El grupo avanza en su proceso de reconstrucción y saneamiento con una opinión limpia del auditor y un EBITDA negativo de 3,4 millones de euros.
Tras culminar su reestructuración financiera el pasado julio, Grupo EiDF ha presentado sus resultados correspondientes al primer semestre de 2025. El periodo ha estado marcado por la reconstrucción operativa y contable del grupo, pero también por la obtención del primer informe de auditoría sin salvedades desde 2022.
El plan de saneamiento y revisión interna acometido desde mediados de 2024 ha permitido al grupo obtener una opinión favorable de PwC, su auditor, aunque los resultados también arrojan unas pérdidas netas de 12 millones de euros y un EBITDA negativo de 3,4 millones. Asimismo, la compañía ha registrado ventas por 18,6 millones de euros.
Para EiDF estos resultados son consecuencia directa del esfuerzo de depurar el balance y revisar los proyectos heredados, con el objetivo de reflejar con precisión su situación financiera. Durante el año 2024 se llevó a cabo una profunda revisión contable que afloró ajustes de ejercicios anteriores, y en 2025 el nuevo equipo directivo ha trabajado en revisar la viabilidad técnica y operativa de su cartera de proyectos de autoconsumo y generación.
“La depuración del pipeline no solo mejora la calidad de nuestros activos futuros, sino que también refuerza la credibilidad de EiDF como operador responsable en el sector de las energías renovables”, afirmó Joan Gelonch, CEO de la empresa.
EiDF conecta sus primeros parques solares y diversifica su actividad
El grupo ha conectado recientemente a la red sus tres primeros parques solares, con una potencia total de 4,81 MW y prevé sumar otros 20,3 MW en los próximos meses. Asimismo, en el área de autoconsumo, ha desarrollado instalaciones por 16 MW y cuenta con una cartera próxima a ejecución de 35 MW, de los que 7 MW corresponden a proyectos EPC y 28 MW en modalidad PPA.
En paralelo, EiDF sigue trabajando en diversificar su actividad más allá de la fotovoltaica, con soluciones integrales de eficiencia energética que incorporan tecnologías como domótica, sistemas de almacenamiento con backup, aerotermia y geotermia, además de servicios de movilidad sostenible y certificaciones CAEs.
Con estos movimientos, la firma persigue consolidar una base sólida con la que retomar el crecimiento a partir de 2026, apoyándose en la profesionalización de su gestión, la eficiencia operativa y un modelo de negocio orientado a la “sostenibilidad y la transparencia”, aseguran.
