El déficit del sistema eléctrico español cayó un 13,9 % en 2020 respecto al año anterior, hasta situarse en los 14.294 millones de euros. Así lo revela el informe sobre el estado de la deuda del sistema eléctrico, publicado recientemente por la CNMC.
Cabe recordar que desde el año 2000 y hasta el ejercicio de 2013, los ingresos del sistema eléctrico nacional fueron insuficientes para cubrir sus costes. Así, se fue generando esta deuda que veinte años después seguimos arrastrando y que, según las previsiones de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, no se saldará hasta el 31 de diciembre de 2028.
Desde el comienzo del siglo, 2014 fue el primer año en el que sistema eléctrico registró superávit por valor de 550 millones de euros. Esta situación favorable se repitió en 2015, 2016, 2017 y 2018, si bien la cuantía del saldo positivo ha sido cada año menor. En total, el superávit generado durante estos años alcanzó los 1.687 millones de euros.
Durante los ejercicios de 2019 y 2020 se aplicó parte de este superávit para cubrir los desajustes temporales y desviaciones transitorias entre ingresos y costes. En concreto, en 2019 se transfirieron 527,6 millones de euros para que el ejercicio finalizase en equilibrio.
Por su parte, en la liquidación provisional número diez de 2020 se transfirieron 506 millones, lo que supone cubrir el 84,96 % de la liquidación provisional. Así pues, en total se han destinado 1.034 millones de euros procedentes del superávit generado en años anteriores para paliar los desajustes de los dos últimos ejercicios.
Anteriormente, entre 2017 y 2018, se destinaron un total de 649,3 millones del superávit a pagos a empresas por sentencias del Tribunal Supremo sobre la financiación del bono social (518 millones), ayudas a la inversión de energías renovables (120 millones) o pronunciamientos judiciales a favor de plantas de tratamiento de purines (11,3 millones).
La deuda del sistema eléctrico español se estructura en diversas categorías de derechos de cobro. Concretamente, el derecho de cobro asociado al Fondo de Amortización del Déficit Eléctrico (FADE) representa el 84,1 % del importe total pendiente de cobro, seguido del derecho de cobro del Déficit 2013, con un 14,1 %.
Durante el año 2020, el importe total en concepto de anualidad de los derechos de cobro correspondientes a la deuda del sistema eléctrico ascendió a los 2.710 millones de euros, un 0,51 % superior a la anualidad total satisfecha en 2019. Por su parte, la anualidad estimada para el año 2021 con los datos disponibles a 31 de diciembre de 2020 es de 2.464,5 millones de euros, un 9,07 % inferior a la satisfecha en 2020.
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