PepeEnergy abre la comercialización de electricidad a cualquier usuario

PepeEnergy, la marca de PepePhone enfocada al sector eléctrico, abre hoy, 7 de marzo, sus servicios de comercializadora de electricidad a cualquier usuario que desee contratar con la compañía. Desde su lanzamiento en septiembre de 2015, PepeEnergy cuenta ya con 5.000 clientes (como publicó el diario El Confidencial), pero se requería como condición ser cliente de Pepephone; esta restricción desaparece ahora.

Pedro Serrahima, director general de PepeEnergy, se muestra convencido de esta apuesta en declaraciones a la redacción, con un toque políticamente incorrecto, trasladando la fórmula de PepePhone al mundo energético. “No hay plan de negocio, no hay plan de marketing, no hay plan estratégico. Sólo hay principios y ganas. Esta vez tenemos que probar a hacerlo así, jugando. Luego si el juego se convierte en profesión, como los futbolistas, pues perfecto. Pero tal como está el mercado, mejor jugar y reírse”.

El modelo de negocio de PepeEnergy es el de una comercializadora de energía eléctrica, para lo cual han contratado una empresa que sabe comprar energía 100% verde para ellos, (“nosotros no sabemos”, señalan), para después vender energía exactamente al precio de coste añadiendo 1 euro al mes para sufragar los costes no directamente asociados a la compra de energía. Serrahima señala que este proyecto es rentable desde el primer día. “Al menos no nos hace perder dinero. En caso contrario, no jugaríamos”.

Además, la empresa pretende destacar por su transparencia, quieren ser la primera empresa de energía en la que no existirá información confidencial y todo estará a la vista: todos los contratos relacionados con lo que el usuario paga de electricidad serán públicos, informan en su web.

¿Qué mensaje lanza PepeEnergy al mercado? “Ofrecemos paz. Paz auditable. Sabes que tu factura va a precio de coste y no necesitas mirarla, pero si no te fías, tienes toda la información para hacerlo. Ese tiempo que te roba todos los meses tu empresa de luz en discusiones, preocupaciones y análisis de conceptos raros, los puedes ya dedicar a otras cosas más útiles”, explica Pedro Serrahima; en su opinión, “en un mundo ideal, una persona no debería dedicar ni diez segundos a gestionar los problemas de sus empresas de telecomunicaciones, energía, banca o seguros”.