Chint, con la formación: dona 20.000 euros en material eléctrico para los alumnos del Tomás y Valiente

Los alumnos de los ciclos de formación profesional que dependen del Departamento de Electricidad del Instituto Francisco Tomás y Valiente de Madrid están de enhorabuena. Gracias a una iniciativa de Chint, que ha decidido donar 20.000 € para la adquisición y renovación de material eléctrico, podrán disfrutar de nuevas herramientas para poner en marcha sus proyectos prácticos. Una actuación que repercutirá en una gran cantidad de beneficios para el centro y que se enmarca dentro de la estrategia del fabricante de seguir apostando por la formación de nuevos instaladores.

Cuando Verónica Tortosa, Directora General Adjunta de Chint, visitó las instalaciones del Tomás y Valiente, pudo apreciar dos cosas: la gran vocación de todo el equipo docente y la necesidad de medios y materiales para seguir desarrollando las funciones prácticas de la formación profesional. Fue entonces cuando surgió la posibilidad de colaboración entre ambas entidades a través de una donación de material eléctrico y de cursos de formación para el profesorado y el alumnado, además de la firma de un convenio para la realización de prácticas de formación en la empresa. 

Se trata de una donación de material eléctrico de Baja Tensión, que el Instituto Tomás y Valiente ha solicitado del catálogo de Chint, tal y como explica el Jefe de Departamento de Electricidad del centro y profesor del Ciclo Formativo de Sistemas Electrotécnicos y Automatizados, Juan Alberto Melchor: “No nos han donado el dinero para comprarlo, sino que hemos realizado el pedido de material y ellos nos lo han entregado directamente en el centro”.

De esta manera, han podido adquirir elementos de protección (interruptores automáticos, magnetotérmicos o guardamotores), de señalización y maniobra (contactores, relés de control, pulsadores, temporizadores, pilotos o finales de carrera), y elementos de medida (como amperímetros o voltímetros), entre otros.  

¿Cómo se van a beneficiar los alumnos?

Una donación de la que los alumnos podrán beneficiarse “directamente” para realizar sus prácticas en los talleres. “Parte de este material servirá para reemplazar al existente puesto que en un centro de formación profesional se están realizando prácticas de manera constante y el material eléctrico suele dañarse” explica Juan Alberto Melchor a este medio. “Somos un centro público y no siempre disponemos de una partida económica suficiente para hacer frente a estos gastos, por lo que ahora podremos realizar prácticas que antes no podíamos hacer”, reconoce.

Con los alumnos de los Grados Medio y Superior del Departamento de Electricidad, el Tomás y Valiente desarrolla proyectos de sistemas domóticos, automatismos industriales, instalaciones eléctricas en viviendas y edificios, cuadros eléctricos, instalaciones eléctricas solares fotovoltaicas y muchos más, que a partir de ahora se van a ver potenciados gracias a la donación. 

El material aún se está desembalando, aunque fue enviado al instituto en el mes de septiembre.

“Donar para ser útiles a alumnos y profesores”

El objetivo de Chint con este tipo de actuaciones no es otro que “donar para ser útiles a alumnos y profesores”. Así lo explica su Directora General Adjunta, Verónica Tortosa, que remarca que Chint es una empresa que “apuesta por la formación de calidad y busca facilitar todo lo que esté en su mano para conseguirlo” en centros con los que es posible la “coordinación”, como es el caso del Tomás y Valiente, puesto que tiene una mentalidad “innovadora” con la que se sienten muy cómodos en la empresa fabricante.

“Nuestro producto ya está en las mesas de los talleres para que los alumnos los puedan probar y despertar su curiosidad con el fin de que el día de mañana puedan poner en marcha un sistema eléctrico en nuestras casas o líneas de producción”, cuenta Verónica Tortosa al área de Material Eléctrico de C de Comunicación. 

Esta no es la primera vez que Chint apuesta por potenciar la formación. En los últimos dos años también lo ha hecho aportando productos a institutos de Madrid como el Cantizal, La Paloma o el Juan de la Cierva, pero también en Galicia, Valladolid o la zona de Levante. “No hacemos esto para cubrir el expediente, sino porque necesitan material”, señala Tortosa. “Si el sector público no lo hace, tenemos que hacerlo nosotros”.

Un enriquecimiento bidireccional entre empresas y centros formativos

Desde Chint tienen muy claro su apuesta por el futuro porque “empresa y formación profesional tienen que enriquecerse bidireccionalmente ya que es la única manera de que nuestros estudiantes se sientan útiles el día de mañana. Si no conectamos con nuestros centros de futuros profesionales y no los tenemos en cuenta en nuestro proyecto, – continúa la Directora General Adjunta -no habrá chispa en lo que fabricamos porque de ahí es donde llegan las nuevas ideas”, sentencia.