Prácticamente la totalidad de instaladores españoles confía en la distribución profesional a la hora de adquirir su material; una gran mayoría sigue prefiriendo los canales tradicionales, aunque el comercio electrónico aumenta de forma lenta, pero constante; sin embargo, un 46 % de los profesionales afirma comprar directamente del fabricante.
Estas son, a grandes rasgos, las principales conclusiones que se pueden extraer de un estudio sobre el comportamiento y las tendencias del mercado de las instalaciones eléctricas al que ha tenido acceso ADIME. El análisis se ha desarrollado a nivel europeo, han participado más de 3.300 empresas instaladoras de siete países, y también incluye cifras sobre el mercado español.
Uno de los datos más relevantes que recoge el estudio es que el 98 % de los instaladores españoles compra en mayoristas especializados, es decir, en la distribución profesional. De ellos, el 7 % prefiere el comercio electrónico, mientras que el 93 % opta por canales más tradicionales.
En este sentido, el 72 % de los profesionales sigue realizando sus pedidos por teléfono, fax, email o a través del representante de ventas y el 21 % restante opta directamente por acudir al mostrador.
Sin embargo, la cuota del comercio electrónico crece, lentamente, pero de forma constante. Y es que el 30 % de los instaladores afirmó haber aumentado de forma significativa la compra online en la distribución profesional, un 59 % señaló que su comportamiento en este sentido no había variado y el 11 % restante corresponde a aquellos instaladores que afirmaron haber reducido sus compras online y los que respondieron ‘no sabe/no contesta’.
El contrapunto a estas positivas cifras lo pone otro dato: 4 de cada 10 instaladores españoles, el 46 %, compra directamente a fabricantes; 1 de cada 4 adquiere productos, principalmente consumibles, en tiendas de bricolaje, fundamentalmente, por la disponibilidad de producto.
En esta línea, los instaladores que solo se dedican a actividades eléctricas compraron con mayor frecuencia en superficies de bricolaje, directamente a los fabricantes y en tiendas online no especializadas.
Por su parte, aquellos que trabajan también en el ámbito de la climatización “gastan más dinero” en la distribución profesional, mientras que las empresas más grandes compran directamente al fabricante con más frecuencia que las tiendas más pequeñas.
Además, expone el estudio recogido por ADIME, durante 2021, la cuota de pedidos directos al fabricante “aumentó significativamente”, un 20 % aproximadamente, principalmente por el incremento del trabajo/demanda/facturación.
No todo es negativo en este apartado, ya que el 73 % de los instaladores señala que no ha cambiado su comportamiento y el 27 % restante afirma que “ha disminuido significativamente” esta práctica.
A través de este estudio, que ADIME distribuirá próximamente entre sus socios, la asociación busca comprender mejor el comportamiento de los instaladores y sus preferencias, de tal forma que la distribución profesional disponga de la máxima información posible y de herramientas que faciliten la toma de decisiones para “potenciar las mejores alternativas entre sus clientes”.
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