La Asociación de Empresas de Energía Eléctrica considera este gravamen “discriminatorio e injusto”, por lo que lo ha recurrido ante la Audiencia Nacional. La entidad esgrime cuatro razones: se trata del único impuesto de este tipo en Europa, grava los ingresos y no los beneficios, solo afecta a algunas compañías y, por último, grava conceptos que no aportan beneficios a las eléctricas.
La Asociación de Empresas de Energía Eléctrica (aelēc), que representa a EDP, Endesa e Iberdrola, ha interpuesto un recurso contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional contra la Orden HFP/94/2023 que regula el impuesto sobre los ingresos extraordinarios de las eléctricas.
En realidad, la citada Orden aprueba los modelos de declaración y pago anticipado del nuevo gravamen promovido por el Gobierno, que espera recaudar 4.000 millones de euros en 2023 y 2024. De hecho, y según adelantó el diario Cinco Días este martes, las grandes energéticas ya han abonado 817 millones de euros en el primer pago de este impuesto temporal.
Los argumentos de las eléctricas
Desde aelēc consideran este tributo “discriminatorio e injustificado” por cuatro motivos:
- En primer lugar, argumentan, se trata de un tributo único en Europa. “La UE ha establecido un impuesto sobre el petróleo y el gas, en el que nada se dice del sector eléctrico. Por tanto, el gravamen aprobado en España paraliza a un sector clave para impulsar el necesario cambio del modelo energético”, aseguran fuentes de la patronal.
- En segundo lugar, aelēc remarca que los tributos europeos gravan los beneficios y no los ingresos, como ocurre en España. “Somos el único país de Europa que grava los ingresos, en concreto, el 1,2 %”, apuntan.
- Por otra parte, la asociación califica el impuesto como “discriminatorio”, porque solo afecta a un determinado número de empresas.
- Por último, aelēc considera que este tributo supone una “incoherencia fiscal”, ya que grava ingresos “que ya estaban topados y regulados por la Administración Pública en 67 euros/MWh. Grava, incluso, conceptos que el Gobierno factura a través del sector eléctrico, pero que no aportan beneficio alguno a las eléctricas”, subrayan.
Más allá de estos argumentos, cabe recordar que, según la previsión de cierre de 2022, Iberdrola alcanzó el pasado ejercicio un beneficio récord de 4.204 millones de euros (+8,2 %); Endesa , por su parte, terminó 2022 con un beneficio neto de 2.398 millones (+26 %).
