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Incendios en cuadros eléctricos y nuevas soluciones

Por Antonio Molina

¿Los incendios en armarios o cuadros eléctricos son más comunes de lo que las personas creen? Una respuesta rápida sería que sí.

Según la National Fire Protection Association (NFPA), siete de cada diez incendios en la industria son de origen eléctrico y un alto porcentaje se origina en los cuadros o armarios. En concreto, un 25 % de los incendios fotovoltaicos se producen en los inversores.

Cuando se tiene acceso a información a través de distintas fuentes, uno se da cuenta de que estos incendios son más frecuentes de lo que se piensa. No obstante, hay que dejar claro algunos puntos importantes:

  • Seguridad. Los cuadros eléctricos son muy seguros y causan pocos incendios, siempre y cuando sean instalados y mantenidos adecuadamente.
  • Seguridad y protección aumentada. Sin embargo, y sabiendo que son uno de los puntos críticos, conviene proporcionarles una protección o seguridad aumentada.

Los armarios de distribución eléctrica, esenciales para la gestión de la energía en instalaciones, están compuestos por interruptores, disyuntores, barras colectoras, etc.

Estos deben operar dentro de rangos de temperatura específicos para evitar el riesgo de fallas. El calentamiento excesivo en éstos suele ser causado por diversos motivos, lo que puede derivar en riesgos de seguridad e incendios.

¿Por qué se producen los incendios en cuadros o armarios eléctricos?

Los incendios son causados por dos grandes factores:

-Factores externos:

  • Medioambientales: lluvias, humedad, polvo, tormentas eléctricas, etc.
  • Envejecimiento de los componentes: degradación de los materiales aislantes y corrosión de las conexiones.
  • Animales: roedores, reptiles.
  • Daños físicos: golpes, etc.

-Fallas eléctricas:

Una falla eléctrica (circuito abierto, cortocircuito, sobrecarga, cargas armónicas, falla a tierra) es un circuito eléctrico anormal que interrumpe el flujo de corriente previsto a través del sistema. Dentro de los principales causantes de fallo eléctrico, tenemos:

  • Mal diseño o diseño inadecuado. Mala configuración mecánica o eléctrica. Por ejemplo, selección incorrecta de los componentes, protecciones, cableado, etc.
  • Instalación incorrecta. Conexiones realizadas erróneamente, no mantener distancias de seguridad entre elementos activos o entre éstos y la envolvente, etc.
  • Equipos defectuosos o de baja calidad. Dañados, de baja calidad o que no cumplen con los requisitos técnicos necesarios.
  • Mal uso. La mala utilización de los equipos, como conectar un aparato con un enchufe que no está en buenas condiciones. Hacer funcionar las instalaciones en un ambiente inadecuado, acercando o poniendo en contacto los conductores con materiales combustibles con altas probabilidad de inflamación.
  • Mantenimiento inadecuado y limpieza. Especialmente la falta de realización de revisiones exhaustivas del cuadro que identifique componentes dañados y degradados para su reparación o reemplazo. Revisión y reapriete de conexiones.

Protecciones eléctricas convencionales

Normalmente, y por defecto, los circuitos eléctricos de un cuadro se protegen mediante interruptores automáticos e interruptores diferenciales de corriente. Sin embargo, estos elementos no detectan con antelación determinados fallos, como el fallo de arco o defectos de contacto.

Protección contra incendios

En materia de protección, se han hecho múltiples avances gracias al desarrollo de productos para mejorar la seguridad y cubrir las recientes necesidades:

Para mantenimiento

-Cámaras termográficas. Herramienta preventiva para identificar puntos calientes.

Monitoreo de fallas eléctricas

-Nuevos dispositivos que sirven para el monitoreo y la identificación predictiva de anomalías o fallas en los cuadros eléctricos (detección por fallo de arco, etc.).

Detección previa a incendios

-Detección por cable térmico antes de que se produzca un incendio (por fibra óptica, etc.).

-Nuevos sensores que analizan continuamente el aire en el interior del cuadro para detectar, de forma anticipada, sobrecalentamientos.

Detectores de incendios autónomos con comunicación

-Detectores autónomos ópticos y/o térmicos, con notificación de evento.

 Propagación y extinción

-Productos pasivos para evitar la propagación del incendio.

Productos de extinción

Origin Fire, un nuevo dispositivo no invasivo de detección y extinción de incendios en su fase inicial para inversores, armarios eléctricos, etc.

Importancia de priorizar la seguridad

Teniendo en cuenta todo lo anterior, no hay duda de que conviene priorizar la seguridad en estos equipos, pues no solo pueden afectar a la continuidad de la actividad, sino que incluso pueden llegar a derivar en incendios con consecuencias desastrosas para nuestro negocio.

Por todo ello, se hace imprescindible estudiar y adoptar medidas con estrategias de prevención y protección en estos equipos, entre las que podemos citar termografías, mantenimientos, limpiezas, monitorización de fallas, protecciones, etc.

Y resulta especialmente interesante adoptar medidas de protección aumentada, como Origin Fire.

En términos económicos, el costo de implementar estas medidas es significativamente menor en comparación con los gastos asociados a las consecuencias de un siniestro.

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