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Necesidad de impulsar la formación profesional dula

Formación Profesional Dual: queda mucho por hacer

Por Antoni Ruiz

La nueva Formación Profesional (FP) requiere de la innovación en nuevos modelos de aprendizaje basados en entornos reales de trabajo, “actualizando y dualizando” todos los currículums de los ciclos formativos de Grado Medio y Grado Superior entre el mundo académico y las empresas.

De nada sirven los esquemas rígidos del pasado, que les explicaron a nuestros padres. Esquemas con creencias limitantes y falsos mitos sobre las “carreras y los másteres universitarios” como único camino de capacitación y acreditación de competencias (muy necesarios), pero para nada exclusivos como acceso al conocimiento del siglo XXI.

El objetivo en la actualidad es concienciar al tejido empresarial, a los centros educativos, a las organizaciones y a la sociedad sobre la necesidad de impulsar entre todos una Formación Profesional Dual de calidad en nuestro país.

Esto, sin duda, y por experiencias de éxito en nuestro entorno europeo, desembocará en una reducción del desempleo juvenil, una mejora de la competitividad de nuestras empresas y el acercamiento entre el mundo empresarial y el educativo.

Aprendizaje con la experiencia

Ningún aprendizaje significativo ocurre solo a través del consumo de conocimientos. Sucede cuando actuamos sobre lo que aprendemos, pasamos por la experiencia, asumimos riesgos y luego desarrollamos conocimientos a través de la lente de esa experiencia.

En mis innumerables reuniones, conferencias y diálogos con los jóvenes por toda España detecto una falta de información (en general), hasta la fecha, sobre todas aquellas salidas profesionales y oportunidades de formación, con una línea clara de empleabilidad que les aporte ilusión por un proyecto u otro. Podemos decir que estamos ante uno de los momentos de la historia con más acceso a la información y el conocimiento, con un rendimiento nefasto en lo que se refiere a la orientación y acompañamiento en los estudios post-obligatorios, salvo en honrosas excepciones, que las hay y muy significativas.

En general, existe en España falta de información, hasta la fecha, sobre las salidas profesionales y oportunidades que aporta la Formación Profesional.

Que nadie se asuste hasta el punto de rendirse, que aquí, como dicen en términos deportivos, hay partido. Es decir, el país tiene dinamismo y falta talento por los cuatro costados, sí, pero ya sea más lento o más rápido (eso dependerá de la implantación de la nueva ley de Formación Profesional en las Comunidades Autónomas con competencias en educación), se llegará a los términos de calidad educativa como en otros países. Países donde sin duda han hecho los deberes mucho antes, poniendo la FP donde le corresponde; todo está por hacer y solo falta voluntad.

En España queda mucho trabajo por hacer y ahora toca arremangarse y ponerse las pilas entre todos. Es obvio que una ley que no se materializa e implanta es papel mojado y no nos podemos dormir en los laureles de nuevo otra nueva década.

Concienciar al tejido empresarial sobre la FP

Comentaba más arriba sobre la necesidad de concienciar al tejido empresarial. En este ámbito, se están llevando a cabo iniciativas para mejorar la formación y el relevo generacional en el sector de la electricidad y las instalaciones de energía. Algunas de estas iniciativas que podemos enumerar son:

  • Incentivos a la contratación de jóvenes: El Gobierno español está impulsando medidas para fomentar la contratación de jóvenes, como, por ejemplo, la reducción de las cotizaciones a la Seguridad Social para los contratos indefinidos realizados a jóvenes menores de 30 años. Estas medidas incentivan a las empresas a contratar a jóvenes, lo que contribuye a garantizar el relevo generacional y la formación de nuevos profesionales en el sector.
  • Certificaciones de competencias profesionales: Otra iniciativa que se está llevando a cabo en España es la certificación de competencias profesionales para los trabajadores del sector de la energía. Estas certificaciones permiten a los trabajadores demostrar sus habilidades y conocimientos técnicos, lo que puede mejorar su empleabilidad y su carrera profesional. Diversas empresas están ofreciendo programas de certificación de competencias profesionales para sus trabajadores.
  • Alianzas estratégicas: Finalmente, algunas compañías están estableciendo alianzas estratégicas con universidades y centros de formación para desarrollar programas específicos de formación para el sector de la energía. Estos programas pueden incluir cursos de formación, investigaciones conjuntas, becas y programas de prácticas.

En resumen, estas son algunas de las iniciativas que se están implantando en España para mejorar la formación y el relevo generacional en el sector de la electricidad y las instalaciones de energía. Es importante destacar que la colaboración entre empresas, centros de formación y Administraciones Públicas es esencial para garantizar una formación de calidad y el desarrollo de nuevas generaciones de profesionales en el sector.

En tiempos de cambio los aprendices heredarán la tierra, mientras que los expertos estarán equipados para un mundo que no existe”, dejó dicho el filósofo y escritor norteamericano Eric Hoffer, frase que habla de la importancia de la formación.

La sociedad española en su conjunto tiene que situar a la FP donde se merece.

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