La cadena de supermercados ha lanzado una serie de productos inteligentes, entre ellos una tira led, una bombilla y un enchufe, que el usuario puede gestionar desde el móvil o a través de la voz. De este modo, la firma alemana se suma a otras cadenas como Lidl, que a finales de 2020 también lanzó su propia serie de soluciones domóticas para la Smart Home.
El sector de la domótica facturó el pasado año alrededor de 500 millones de euros en España y sus soluciones ya están presentes en un 11 % de las viviendas españolas. Además, las previsiones apuntan que en solo cuatro años estas cifras se duplicarán, hasta alcanzar los 3,8 millones de hogares conectados, según datos del portal de estadística Statista.
En este contexto, cada vez son más las grandes superficies dirigidas al usuario final que apuestan por este segmento de negocio. Lo hizo Lidl a finales de 2020, cuando lanzó su propia serie de soluciones conectadas, y ahorsa es otra cadena de supermercados alemana, Aldi, la que se lanza al mercado del hogar conectado.
Desde el pasado miércoles, y por tiempo limitado, la firma germana comercializa una serie soluciones inteligentes que van desde una tira led a una cámara de videovigilancia, pasando por una bombilla led y un enchufe. Todos estos productos tienen en común que se pueden gestionar desde el móvil, a través de la app ‘tuya’ y son compatibles con los asistentes de voz de Google y Amazon.
Características de los productos smart
La tira led tiene una longitud de dos metros, incluye 30 puntos de luz y presenta una entrada de corriente continua de 5 voltios. Como el resto de soluciones mencionadas, incorpora un temporizador y su intensidad se puede regular para “conseguir un resultado personalizado y único”, explican desde Aldi.
Por su parte, la bombilla led, que cuesta menos de siete euros, incluye temporizador y cuenta atrás, además de ofrecer hasta 16 millones de colores disponibles. Por otro lado, el enchufe Smart Wifi de Aldi mide el consumo del dispositivo conectado y permite programar diferentes funciones a través de su calendario integrado.
Por último, la cámara de videovigilancia incluye un sensor de movimiento que abarca un radio de hasta 5 metros, incorpora visión nocturna y ofrece la opción de transmitir en directo y grabación. Esta es la solución smart menos económica de todas, aunque su precio está por debajo de los 30 euros.
