“Si suben los precios de la energía, se tensiona la producción de materias primas como el aluminio”. 24 horas después del inicio de la invasión, analizamos con Juan Vázquez, profesor universitario e investigador especialista en Economía, cómo puede afectar el conflicto bélico al sector del material eléctrico de nuestro país.
“Los precios de las materias primas ya estaban muy tensionados, porque la oferta tiene muchos problemas para seguir a la demanda. Ahora, el conflicto bélico supone una ‘tormenta perfecta’ que llega en el peor momento posible”. Así de rotundo se muestra Juan Vázquez, investigador y docente universitario de ‘Economía Europea’ y ‘Economía Política’, en declaraciones a este medio.
Y es que Rusia es uno de los principales proveedores de materias primas clave del mundo. De hecho, las exportaciones rusas suponen un 8 % de la producción mundial de petróleo y un 6,2 % de la generación global de gas. En cuanto a las materias de mayor interés para el sector eléctrico, las exportaciones rusas representan el 5,3 % del total de la producción mundial de níquel, cifra que asciende al 4,2 % y al 3,3 % en el caso del aluminio y el cobre, respectivamente.
Fuente: JP Morgan, ICE, Bloomberg / Gráfico: LR-AL
Además, más de 100 empresas españolas operan en territorio ruso, entre ellas algunas del sector del material eléctrico, y hay cerca de 15.000 compañías nacionales que mantienen relaciones comerciales de exportación o importación con Rusia o Ucrania, según datos del Ministerio de Industria recogidos por Europa Press.
El aluminio y el níquel, en máximos históricos
“Rusia no produce cantidades extremas de petróleo, gas, níquel, aluminio y cobre, pero sí lo suficientemente importantes como para afectar al mercado, ya que, si de toda la producción mundial se elimina esta parte, aunque sea pequeña, influye en los precios del resto, porque los importadores de estas materias primas procedentes de Rusia y Ucrania tienen que buscar alternativas“, explica Juan Vázquez.
En este sentido, el impacto de la guerra ya se está dejando notar en los mercados. El barril de Brent aumentó ayer su cotización un 5 %, hasta superar la barrera de los 100 dólares, y el gas se llegó a disparar en las horas centrales del día un 60 %, hasta los 144 euros el megavatio hora. Pero, ¿qué tiene que ver esto con el sector eléctrico?
“Las subidas del petróleo y el gas provocan que la fabricación de cualquier tipo de producto se encarezca; si suben los precios de la energía, se tensiona la producción de materias primas como el aluminio, cuya producción requiere de un consumo eléctrico intensivo. Por ello, el precio del aluminio va a subir”, concluye Juan Vázquez.
De hecho, ya se ha encarecido. El aluminio marcó su máximo histórico ayer en la Bolsa de los Metales de Londres (LME). Su cotización se incrementó un 5,5 % (+196 dólares), hasta los 3.519 dólares por tonelada. “Rusia es el tercer exportador de aluminio del mundo, después China e India. La cantidad de Rusia, aunque es casi insignificante si se compara con China, sigue siendo importante en el mercado global”, asegura.
Evolución de la cotización del aluminio desde el inicio de 2021 al 24 de febrero de 2022. Fuente: LME.
También registró su máximo histórico ayer el níquel, un elemento esencial en la fabricación de baterías para vehículos eléctricos. Esta materia prima incremento su cotización en la LME un 4,4 % (+1.160 dólares), hasta alcanzar los 26.100 dólares por tonelada.
En el lado contrario de la balanza, la cotización del cobre se mantiene estable, incluso bajó ligeramente este jueves (-0,21 %, -9 dólares) y continúa rondando la barrera de los 10.000 dólares por tonelada, cuando a principios de 2021 estaba por debajo de los 8.000 dólares.
Daños colaterales: la factura eléctrica y el transporte
España tiene asegurado el suministro de gas, solo un 8,5 % procede de Rusia, pero su encarecimiento también va a “afectar a la factura eléctrica“, tal y como recalca Juan Vázquez y en línea con las declaraciones de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. De hecho, el precio de la electricidad ya se ha encarecido este viernes un 16,7 % respecto al día anterior, hasta los 240 euros.
En este sentido, cabe recordar que el gas es la tecnología más cara y la encargada de fijar el precio de la electricidad en el mercado mayorista (POOL) en aquellos casos en los que el resto de fuentes de producción no son capaces de cubrir la demanda nacional. “Es decir, el conflicto no va a afectar a España tanto desde el punto de vista del suministro, como a nivel de precios, especialmente en lo relativo al precio de la electricidad”, explica Vázquez.
Por último, el incremento del precio del petróleo se va a cobrar otra víctima colateral: “Todo lo que tenga que ver con el transporte también va a subir, el marítimo ya estaba tensionado, pero ahora todas las rutas que pasen por zonas rusas y ucranianas van a tener que buscar trayectos alternativos“, apunta Juan Vázquez para concluir.
