La CNMC ha aprobado un nuevo formato para el etiquetado de la electricidad en el recibo eléctrico que se empezará a aplicar a partir del próximo mes de abril. El nuevo sistema busca informar sobre el impacto medioambiental de la energía consumida y las fuentes de generación que emplea la comercializadora de cada consumidor.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, CNMC, ha aprobado el nuevo modelo normalizado que tendrán que utilizar las comercializadoras a partir de abril de 2022 a la hora de etiquetar la energía eléctrica en la factura de los consumidores.
El nuevo sistema “aporta información sobre el impacto medioambiental de la electricidad consumida y presenta un diseño más sencillo”, explica la CNMC. Para ello, las empresas comercializadoras utilizarán un formato común e incluirán sus cifras de forma individualizada.
El formato aprobado se adapta a los cambios previstos en la Resolución de 28 de abril de 2021, de la Dirección General de Política Energética, en la que se establece que la factura eléctrica debe incluir el epígrafe ‘Origen e impacto ambiental de la electricidad consumida’ y su correspondiente contenido.
Novedades en la factura
Así pues, a partir de abril de 2022, la factura de los consumidores incluirá un diagrama sectorial en el que figurará el porcentaje de cada fuente de energía que la comercializadora, en particular, ha suministrado al conjunto de sus clientes. Además, incluirá unos porcentajes mediante los cuales se compara el mix de la comercializadora como el mix de generación nacional, tal y como se puede observar en la imagen inferior.
Fuente: CNMC.
Otra de las novedades es que se modifican las unidades empleadas para exponer las emisiones de CO2 y de residuos radioactivos, que a partir de la citada fecha se presentarán en números enteros, “más fácilmente legibles”, aseguran desde la CNMC.
El tercer y último cambio que se empezará a aplicar a partir del próximo mes de abril es que la factura eléctrica incluirá un enlace al sitio web de la CNMC en el que se recoge la normativa y los trámites relacionados con las garantías de origen de la electricidad y su etiquetado.
Etiquetado de la electricidad y Garantías de Origen
Según explica la CNMC, “la electricidad fluye de forma instantánea, por lo que no es posible conocer la procedencia real de la energía que llega a los hogares”. Sin embargo, especifica el propio organismo, existe un convenio internacional mediante el que se acredita el factor ambiental en el periodo de un año: las garantías de origen y el etiquetado de electricidad.
De esta forma, las comercializadoras muestran una vez al año (los datos que se incluyan a partir de abril de 2022 se corresponderán con la energía producida a lo largo de 2021) y de forma fiable el origen de la energía que ofrecen a sus clientes. Así, este sistema evita cualquier estrategia de ‘lavado verde’ que pudiera proporcionar una información engañosa sobre el impacto medioambiental de una empresa.
En este sentido, los productores de energía solicitan a la CNMC las garantías para certificar el volumen de MWh generados a partir de fuentes renovables; esto se traduce en anotaciones en cuenta para llevar un registro contable electrónico de los volúmenes generados y transferidos, al mismo tiempo que se asegura que la energía no se contabiliza por duplicado. Cuando los productores tienen las garantías pueden transferirlas a una comercializadora nacional o europea.
Este sistema de Garantías de Origen permite a la comercializadora acreditar ante sus consumidores un porcentaje de energías renovables o de cogeneración de alta eficiencia mayor que el resto de empresas de su competencia. Además, los ingresos generados por la venta de Garantías de Origen deben destinarse a desarrollar nuevas instalaciones renovables o invertirse en I+D para promover una mejora del medio ambiente.
Por último, la CNMC recuerda que su comparador de ofertas permite seleccionar las calificadas como ‘ofertas verdes’, es decir, aquellas que cuentan con un 100 % de energía renovable o de alta eficiencia de acuerdo con el mencionado sistema de garantías que gestiona la CNMC.