En su comparecencia en el Congreso de los Diputados, el pasado 31 de enero, Álvaro Nadal expresó la voluntad del Gobierno de desregular completamente la figura del gestor de cargas. Entidades como AEDIVE y FENIE apoyan esta medida.
Álvaro Nadal, ministro de Energía, reveló en su comparecencia en el Congreso de los Diputados, el pasado 31 de enero, la voluntad de eliminar el gestor de carga: “En nuestra apuesta firme y decidida por el vehículo eléctrico y la Movilidad Eficiente, proponemos desregular completamente la figura del gestor de cargas para que cualquier consumidor pueda ejercer esta actividad”; así lo manifestó en su cuenta de Twitter.
Desde AEDIVE (Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico) ponen de relieve que, actualmente, la figura del gestor de carga se encuentra en una fase de modificación del RD 647/2011 que lo regula, con el fin de relajar los requisitos y facilitar su desarrollo.
Desde que se instauró esta regulación con el objetivo de que el mercado de la infraestructura de recarga pública se desarrollase, “lo cierto es que ha provocado el efecto contrario, generando ciertas incertidumbres como la obligatoriedad, o no, de tener que relegar a un gestor de carga el servicio de un punto de carga, aunque no hubiera facturación del kilovatio, lo que hasta la fecha no han sido capaces de aclarar desde el Gobierno”, subrayan en AEDIVE.
Adaptarse al Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT)
FENIE (Federación Nacional de empresarios instaladores) apoya esta propuesta del ministro y añade que, si se quiere desregular –total o parcialmente– la figura del gestor de cargas, además de actuar sobre el Real Decreto que lo regula, se debería modificar la Ley del Sector Eléctrico. En este sentido, FENIE trasladó a los representantes del Ministerio de Energía, el pasado 15 de enero, la necesidad de crear un escenario de promoción “real” de instalación de la infraestructura de recarga del vehículo eléctrico.
El modelo de gestor de cargas actual está desfasado y no acorde a las necesidades reales que están demandando los usuarios. Por ello, la Federación sostiene que “la infraestructura de recarga del vehículo eléctrico ha de adaptarse, exclusivamente, al Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT) y, de esta forma, el usuario recargar su vehículo eléctrico en unas condiciones de seguridad, sin necesidad de incrementar los trámites para disponer de un punto totalmente legalizado”.
