Se trata de un sistema de carga ultrarrápida por pantógrafo, que forma parte del proyecto ZeEUS de promoción de la movilidad eléctrica urbana, financiado por la Unión Europea.
Endesa ha presentado un punto de carga ultrarrápida para autobuses eléctricos en Barcelona, junto con el nuevo autobús articulado 100% eléctrico de la corporación TMB (Transports Metropolitans de Barcelona); es un sistema que, en unos minutos, añade carga a la batería, aprovechando el tiempo de parada al final de línea, y la llena hasta un 80%. Se prevé que pueda funcionar con pasajeros a bordo dentro de unos dos meses.
La inauguración de este punto de carga, con una demostración, se llevó a cabo el pasado 21 de septiembre, con la asistencia de representantes de Endesa, el Ayuntamiento de Barcelona y TMB, así como de otros organismos implicados en el proyecto. Se trata de una iniciativa que se enmarca en el proyecto ZeEUS de promoción de la movilidad eléctrica urbana, financiado por la Unión Europea y en el que participan un total de diez ciudades del continente.
El sistema de carga ultrarrápida por pantógrafo consta de dos elementos: por un lado, el cargador, un pilar de unos 5 metros de altura, con una apariencia similar a una farola, que está ubicado en la última parada del recorrido del autobús (final de trayecto), donde el vehículo se detiene, habitualmente, unos minutos antes de reemprender su ruta; por otro, el pantógrafo propiamente dicho, un brazo mecánico retráctil instalado en el techo del autobús que se despliega hasta unirse a la campana del pilar, a la que se acopla para iniciar la carga de la batería del autobús mientras el vehículo está estacionado.
Este sistema, también llamado carga de oportunidad, permite llenar hasta el 80% de la batería del vehículo –que siempre circula entre el 80 y el 40%, nunca bajando de este nivel– en un tiempo de entre 5 y 8 minutos gracias a los 400 kW de potencia del cargador. El cargador, además, está conectado al Centro de Control de Endesa, desde donde se comparten los datos con el Centro de Control de TMB. Esta información permite saber, en tiempo real, qué actividad está desarrollando el dispositivo y el estado del vehículo que se ha conectado, una información muy útil para la operación de la flota de TMB.
El autobús tiene sensores en dos puntos diferentes. En la parte delantera se halla el sensor de aproximación, que avisa de que el autobús se está acercando al pilar cargador y prepara el sistema para su puesta en marcha. En la parte posterior se encuentra el sensor de posición, que confirma al brazo pantógrafo que ya se puede desplegar para acoplarse a la campana y proceder, así, a la carga. El brazo se despliega en pocos segundos y, tanto durante este proceso como a lo largo de los escasos minutos que dura la carga, los pasajeros pueden subir y bajar con toda seguridad del vehículo.
La línea de autobuses metropolitanos que estrenará este sistema es la H16, que une el Fórum de Barcelona con la Zona Franca, trazando una línea paralela al mar que pasa por Poblenou, la Villa Olímpica, la plaza de Cataluña y la plaza de España, de unos 12 kilómetros de longitud.
