La actual ley del sector eléctrico prohíbe a las compañías convertirse en gestores de recarga por ser ajenas al mundo energético, hasta que se modifique la normativa.
El Corte Inglés e Ikea no podrán ofrecer servicios de recarga de coches eléctricos en sus instalaciones según se establece la actual legislación del sector eléctrico. Este tipo de centros de la gran distribución no pueden darse de alta como gestores de carga hasta que la normativa del 2013 sea modificada.
El gobierno apuesta por las ventas de coches eléctricos, pero una de las trabas es la escasez de puntos de carga eléctrica, que en España llegan a los 900. Varias compañías, además de Ikea o El Corte Inglés, pidieron al Ministerio de Industria la autorización para instalar puntos de carga eléctricos en sus centros, para vender electricidad o para regalarla como un incentivo por acudir a sus tiendas.
Víctor Audera, director general de Industria y Pymes, dio a conocer la noticia en una jornada organizada por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) y admitía que es su propio departamento ministerial el que tiene que ejecutar la modificación, “pero con un Gobierno en funciones resulta muy difícil cambiar leyes” por lo que la actual ley favorece a empresas del sector energético, como Endesa, Repsol, Iberdrola o Gas Natural Fenosa.
Según publica el diario La Vanguardia, el Gobierno tiene como objetivo que el 1% de los vehículos comercializados en España en el 2020 funcionen con energía eléctrica. Además, tiene previsto lanzar un plan plurianual con colaboración público-privada. Madrid, lleva cierto retraso en la instalación de puntos de carga,aunque permite circular por el bus-VAO (carril para vehículos de alta ocupación) en la A-6 a los coches eléctricos.
