Con ello, la nueva fábrica, puesta en funcionamiento a finales de 2018, podrá fabricar sus productos con mayor precisión y rapidez gracias a la tecnología basada en datos.
Rittal ha incorporado recientemente a su nueva planta de Haiger (Alemania) de 24.000 metros cuadrados, inaugurada el pasado otoño, más de 100 máquinas de alta tecnología para una de sus áreas de producción. Estas maquinarias se irán poniendo en marcha progresivamente y, tal y como ha anunciado la compañía, funcionarán, en un futuro, en red, “basándose en datos”.
Esto permitirá a Rittal producir “con mayor precisión y rapidez gracias a la creación previa de su gemelo digital por ordenador”. Es decir, “las máquinas de la fábrica acceden a estos datos y producen su homólogo en versión real”.
Para ello, todos los sistemas, es decir, no solo las máquinas, sino también los conjuntos de maquinaria, tendrán que funcionar juntos en red para así, poder acceder a diferentes tipos de datos de distintas formas y/o intercambiar información, señala la compañía.
Todo este proceso, además, será controlado y supervisado por una persona, la cual “influirá en estos procesos con precisión”, indica la firma. Ya que “solo así cada máquina sabe exactamente qué debe hacer, cuándo y cómo”.
Tanto las máquinas como la completa reconstrucción de la fábrica ha supuesto para Rittal una enorme inversión, cifrada en 250 millones de euros, y le va a permitir afrontar los retos de la industria 4.0.
