La asociación ha llevado a cabo una encuesta para obtener más información sobre la actual problemática de captación de talento en el sector. De igual modo, hablamos con Alex Burgalés, director comercial de AFME, sobre las causas y posibles soluciones de esta cuestión.
Un 72,7 % de las empresas de AFME han experimentado bastantes o muchas dificultades para contratar personal en el último año. Así se desprende de la encuesta que ha realizado la Asociación de Fabricantes de Material Eléctrico para valorar el alcance de esta problemática actual, así como para conocer las áreas y perfiles de formación más conflictivos.
El estudio ha contado con las respuestas de 44 empresas, que representan un total de 15.662 trabajadores. Por departamentos, el que ha tenido más problemas ha sido el técnico e I+D, donde el 55,2 % de las compañías han sufrido muchas o bastantes dificultades. Le siguen el comercial (38,6 %) y el de fabricación (36,7 %).
En cuanto a los estudios, el 81,8 % de las empresas han tenido dificultades para encontrar graduados en estudios técnicos (ingeniería y similares), siendo éste el perfil que más problemas ha generado. Por detrás, se sitúa la Formación Profesional (FP), con un 68,2 % para el grado superior y un 43,2 % para el grado medio.
Los resultados de esta encuesta permitirán a la entidad defender las posiciones que mejor se ajustan a las necesidades del sector, tanto ante las Administraciones Públicas como en los diferentes foros en los que participa.
¿Por qué al sector le cuesta tanto contratar personal?
Para profundizar más en el tema, desde este medio hablamos con Alex Burgalés, director comercial de AFME, que explica que, tras la pandemia, nuestra economía y muchas del entorno han tenido una fuerte recuperación en la demanda de empleo: “España sigue teniendo un porcentaje de paro elevado, pero, para determinadas posiciones, la demanda está superando a la oferta”.
Por otro lado, considera que existe un déficit de vocaciones, especialmente en la Formación Profesional, que hace que salgan menos titulados en los estudios que más se necesitan. Esta realidad se suma a que el sector todavía no ha sabido proyectar una imagen lo suficientemente atractiva, lo que hace que algunos titulados prefieran trabajar en otros sectores.
Como consecuencia, la falta de talento repercute en que las empresas tengan que invertir más tiempo y recursos en contratar nuevos trabajadores. “En el caso de la escasez de instaladores eléctricos, si esto se traduce en cuellos de botella importantes, podría afectar a las ventas del sector en su conjunto. Desde AFME, apoyaremos todas las iniciativas que realicen los instaladores o distribuidores”, reflexiona.
Adaptar la oferta de cursos a las necesidades laborales
Con el fin de solventar esta problemática, Burgalés defiende hacer esfuerzos para cambiar la percepción histórica que no valoraba a la Formación Profesional como es debido. Además, habría que adaptar la oferta de cursos a las necesidades del mercado laboral con mayor rapidez y comunicar mejor a los futuros estudiantes las opciones que ofrece el cursar FP.
Respecto a la falta de titulados universitarios de carreras técnicas, “todavía estamos en un proceso de análisis, aunque probablemente haya un déficit de vocaciones. Al igual que con la FP, habría que comunicar mejor el atractivo de estudiar carreras técnicas y hacer esfuerzos para incorporar a la mujer a estos estudios, pues el porcentaje sigue siendo demasiado bajo”, concluye.