El presidente de FENIE, Miguel Ángel Gómez, expone los puntos clave de la Circular de acceso y conexión, los cambios en el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT), la Directiva de Eficiencia Energética en los Edificios (EPBD), la reducción de la jornada laboral o la desconexión digital.
Miguel Ángel Gómez, presidente de la Federación Nacional de Empresas de Instalaciones Eléctricas, Telecomunicaciones y Climatización de España (FENIE), sintetiza cuáles son las principales normativas para 2025, así como el importante papel de la entidad en la tramitación reglamentaria.
Pregunta. ¿Cuáles son las normativas o novedades legislativas que atañen a las empresas instaladoras en 2025?
Respuesta. La Circular de acceso y conexión es una de las cuestiones que está tratando FENIE, dado que los gestores de red tienen la obligación desde el día 12 de enero de adaptarse a los requisitos detallados en la mencionada circular. La federación ha trabajado muy activamente en el desarrollo de esta circular por la relevancia que tiene para nuestro colectivo y ahora estamos en el momento de su implementación, por lo que estamos dando las pautas a las empresas instaladoras sobre qué es lo que tienen que presentar, así como haciendo un seguimiento de cómo los gestores de red están implementando las novedades de la circular.
En los próximos meses, también se van a publicar los cambios en el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT). En este sentido, se ha realizado un amplio trabajo en la fase de tramitación de este reglamento y la previsión es que las novedades que se publiquen estén muy alineadas con las propuestas que FENIE ha trabajado a través de la Comisión de Industria, como pueden ser la aparición de la obligatoriedad del contrato de mantenimiento en gran parte de las instalaciones que están reguladas en el REBT o un elevado número de peticiones técnicas.
Desde el punto de vista de la electrificación, otra de las cuestiones que tenemos que acometer es la transposición de la Directiva de Eficiencia Energética en los Edificios (EPBD). Mediante el contacto periódico con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Ministerio de Vivienda, FENIE está trabajando en dotar de una mayor electrificación a los edificios.
Nuestro modelo está centrado en la electrificación de la demanda a través de la bomba de calor; el incremento de la presencia de la fotovoltaica en los edificios, reforzando, de esta forma, tanto la independencia energética de los mismos como el concepto de autoconsumo, es decir, la generación de energía en los puntos de consumo; la dotación de espacios en los edificios para que los usuarios puedan almacenar la energía aguas abajo del contador; o el aumento de las dotaciones de puntos de recarga en los edificios.
P. ¿Cómo valoran desde FENIE todas estas normativas que están aconteciendo en el sector de las instalaciones?
R. Estamos satisfechos con los reglamentos que se van publicando, así como con los borradores de normativa en los que estamos trabajando. Nuestro objetivo es que se electrifique en base al modelo de las empresas que representamos, que, además, está muy alineado con los intereses de la sociedad. Por el momento, los estamentos reguladores nos están dando voz y apoyando en gran parte de las propuestas que estamos planteando, por lo que la valoración es más que positiva.
P. ¿Actúan como interlocutores entre las empresas instaladoras y las Administraciones públicas?
R. Sí. Llevamos trabajando ya varios años en este modelo. Creemos que es la forma de complementar el trabajo que hacen las asociaciones en sus territorios y de aunar, a través de FENIE, el posicionamiento del sector en los ministerios o el Congreso de los Diputados.
Hacerse un hueco como representante del sector de las empresas instaladoras no es una tarea sencilla, pero, tal y como comentaba anteriormente, la federación ha conseguido posicionarse como el altavoz de las empresas que representamos y que los estamentos reguladores conozcan y comprendan las necesidades de nuestro colectivo.
Las comisiones de FENIE son las que establecen el posicionamiento de la federación en las diferentes iniciativas que se van produciendo y, desde la entidad, nos encargamos de las negociaciones con los estamentos reguladores.

P. ¿Hay alguna normativa o novedad legislativa a la que deberían prestar especial atención las empresas instaladoras?
R. La reducción de la jornada laboral y la desconexión digital conforman dos novedades que nos preocupan y en las que puede haber avances este año. Desde FENIE, ya hemos trasladado que las empresas son muy variopintas y que nuestro sector, al ser una industria esencial y estar íntimamente ligada a mantenimientos y averías, no puede asumir ciertas condiciones. Estos servicios no son programables en la gran mayoría de los casos y necesitamos cierta flexibilidad para acometer nuestros servicios.
Por este motivo, les estamos haciendo ver a los reguladores que, si se implanta la reducción de la jornada y la desconexión digital, sería necesario incrementar las plantillas para dar el mismo servicio. No obstante, dada la situación actual que tenemos, es una tarea complicada, lo que se podrá traducir en que los usuarios encuentren dificultades a la hora de restablecer el suministro eléctrico y, por tanto, quedarse sin luz.
También hemos trasladado que estas medidas pueden provocar el aumento del intrusismo en el sector, cuestión que no solo nos afecta como colectivo, sino también a la seguridad de los usuarios y las arcas del Estado. No hay que olvidar que el intrusismo en nuestro sector genera unas pérdidas al Estado de aproximadamente 510.000.000 euros al año.
P. ¿Cómo ayudan a las empresas instaladoras a adaptarse a esta vorágine normativa?
R. Para cada una de las iniciativas en las que participamos, tanto en su fase de tramitación como en el momento de la publicación, se informa a las empresas instaladoras, a través de las asociaciones, de las novedades y avances que se van produciendo de forma resumida. Del mismo modo, nos preocupamos y vamos notificando las diferentes interpretaciones y situaciones que genera una nueva reglamentación.
Por otro lado, el Plan de Acercamiento es una iniciativa que está funcionando muy bien. Estas reuniones con las asociaciones sirven para adelantar por dónde vienen los cambios regulatorios, así como para comunicar el posicionamiento que FENIE está tomando ante las mismas.
Además, si la situación lo requiere, como en el caso de la publicación del Real Decreto de Autoconsumo, preparamos formaciones entre FENIE y las asociaciones para que las compañías conozcan los reglamentos desde un punto de vista neutro. Por ejemplo, participaron más de 5.000 empresas instaladoras en estas formaciones de autoconsumo.
P. Para los próximos años, ¿hay algún cambio o avance legislativo que quieran destacar?
R. A modo de conclusión, indicar que FENIE trabaja para que se descarbonice a través de la electrificación y para que este modelo se ajuste a la sociedad. Así, conseguimos que las novedades regulatorias, además de ser obligatorias, sean beneficiosas para los usuarios y, por consiguiente, cuando la empresa instaladora tenga que prestar un servicio a su cliente, éste lo perciba como algo positivo.
Esta visión, que pretende que la sociedad tenga una participación activa, se plantea para que las instalaciones o soluciones estén cerca de los clientes, en este caso, en los edificios. Al fin y al cabo, nuestra principal fortaleza como colectivo es la cercanía y el trato con la sociedad. Todo lo que sea acercar las soluciones o instalaciones a nuestro entorno de trabajo va a maximizar nuestra presencia y nuestro negocio.