Según las previsiones de FACEL (Asociación Española de Fabricantes de Cables), esta previsión se cumpliría si se reciben y aplican de manera efectiva los fondos Next Generation.
Después de un 2020 en negativo, FACEL (Asociación Española de Fabricantes de Cables y Conductores Eléctricos y de Fibra Óptica) contempla este ejercicio con mejores previsiones: estima que el incremento medio de la actividad de la industria del cable podría situarse en una horquilla entre el +6 y el +9 %, dentro de una visión moderadamente prudente; así lo confirma a este medio Alejandro Saenger, secretario general de la entidad. Estas cifras son factibles “siempre que las expectativas se cumplan en cuanto a la puesta en marcha efectiva de los Planes gubernamentales de Transformación, Resiliencia y Recuperación de la Economia Española y se vayan recibiendo los fondos Next Generation“.
Con todas las cautelas, y teniendo en cuenta la “problemática actual de escasez y encarecimiento progresivo de las principales materias primas utilizadas en sus procesos productivos”, la industria del cable podría acercarse este año a las cifras de negocio de 2019.
Datos de 2020
En lo que respecta a 2020, el volumen total de facturación del sector del cable se redujo un -12,4 % el pasado año (frente a un crecimiento de +8 % en 2019), con unos ingresos que superan los 1.582 millones de euros, tal como revelan las estadísticas difundidas por FACEL, que celebró su asamblea general el pasado 21 de abril en formato telemático en la que compartió estos números con sus asociados.
Jordi Calvo, presidente de la entidad, expuso que estos datos se han producido en un contexto macroeconómico complicado marcado por la pandemia, “especialmente, la caída de la construcción, por su peso relevante en la evolución de nuestro sector con un -15,8 %, así como la evolución agregada de las exportaciones”, con una caída del -20,9 %.
Evolución del negocio de la industria del cable en los últimos años. 2020 refleja una caída del -12,4% frente al ejercicio 2019 (Fuente FACEL. Facturación en millones de euros).
En concreto, el negocio de los cables industriales disminuyó un -10 % en el 2020 (frente al +12,2 % en 2019), que se traduce en un porcentaje de -7,6 % en toneladas (+7,2 % en 2019); mientras que las ventas de cables de telecomunicaciones y datos se desplomaron un -17,9 % (+8,5 % en 2019).
Si se habla de mercados, el frenazo en el mercado nacional para los cables de energía se situó en el -11,4 % (toneladas), y alcanzó el -21,2 % para los cables de telecomunicaciones y datos. Las cifras de exportación registraron una tendencia menos acusada: si hablamos de los cables de energía bajaron un -2,8 % (toneladas), mientras que los cables de telecomunicaciones y datos se contrajeron un -13,8 %. El mercado de accesorios para cables de Media Tensión (MT) se mantuvo en los mismos niveles de 2019.
Factores a considerar en 2021
Tras un primer trimestre de 2021, que ha mostrado un “retroceso generalizado de los indicadores industriales y de servicios”, como explicó Jordi Calvo en la asamblea de FACEL, las perspectivas de la economía para el final del ejercicio están empeorando gradualmente a medida que transcurren las semanas. Las previsiones para la economía española oscilan entre un incremento del PIB nacional del +5,7 % –según la última revisión oficial a la baja– y un ascenso del +4,2 %, acorde con la visión más pesimista.
En este sentido, Jordi Calvó señaló que entre los factores que han marcado el primer tramo de este año se encuentran los problemas en el flujo de suministros procedentes de proveedores asiáticos, el alza en el coste de los fletes de transporte y el aumento de los precios de las materias primas, sobre todo de metales como el cobre y aluminio, y materiales como el PVC (véanse las gráficas), como alertó FACEL a finales del pasado mes de febrero.
Además, el retraso en el proceso de vacunación y la negativa evolución de la pandemia en los primeros meses del año provocará el aplazamiento de la recuperación hasta el segundo semestre de 2021, apuntó Calvo.
Rehabilitación energética en edificios
Como se ha señalado, uno de los factores que será clave en la recuperación económica será la rapidez en la aprobación e implantación de las acciones previstas en el Plan Nacional para la Reactivación, Transformación y Resiliencia de la Economía Española, con los fondos europeos Next Generation. En este ámbito, el presidente de FACEL puso de relieve que la entidad ha participado, junto con otras veinte asociaciones sectoriales, en la presentación a los ministerios correspondientes de Macro Proyecto Tractor (MPT) para la rehabilitación energética de instalaciones eléctricas en edificios, comercios e industria.
Esta iniciativa, liderada por AFME, promueve diversas líneas de actuación, con el objetivo de llevar a cabo la rehabilitación de 600.000 viviendas y 150.000 locales comerciales y naves industriales; el proyecto pretende actuar en aspectos como la renovación de instalaciones antiguas, inversiones en instalaciones fotovoltaicas, adecuación de infraestructuras para el vehículo eléctrico, así como la digitalización de la Administración Pública, industria, así como de los hogares.
El comportamiento del sector exterior, con un aumento previsto de las exportaciones del 7 %; la reactivación del sector turístico; y la aceleración del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) son otras variables que influirán directamente en esta recuperación.
Morosidad al alza
Desde FACEL muestras también su preocupación por la evolución de la morosidad, que ha alcanzado el 5,4 % en 2020 respecto al 3,1% del año anterior (dato de la Plataforma Contra la Morosidad, PMcM). La previsible eliminación gradual de los avales del gobierno a los créditos ICO puede perjudicar posteriormente el nivel de morosidad en nuestro país, comentó Jordi Calvo.
Este dato, añadido al aumento de 4 días de los plazos de cobro verificado en 2021, y a la política restrictiva de las compañías de seguro de crédito, “nos tiene que alertar del riesgo de impagos que la economía en general, y nuestro sector en particular, tendrán que gestionar en los próximos meses”. Hay que recordar que FACEL, a través de la PMcM, participa en acciones para impulsar y conseguir la aprobación en el Parlamento del Régimen Sancionador de la Ley de Plazos de Pago.
