La empresa apuesta por los sistemas de regulación constante paras equipos 1-10Vcc y DALI y por detectores de movimiento con tecnología de infrarrojos.
Dinuy presenta en el mercado sus tecnologías de regulación para luminarias Led: sistemas de regulación automática con los que es posible regular cualquier luminaria Led (downlight, panel, driver, etc.) que incorpore una entrada de regulación, que bien puede ser regulación 1/10Vcc o bien DALI (Digital Addressable Lighting Interface).
La empresa destaca que existen dos tipos de aplicaciones bien diferenciadas para los Sistemas de Regulación Automática:
- En lo que respecta a los sistemas de regulación constante paras equipos 1-10Vcc y DALI, su instalación es idónea en edificios donde existe un considerable aporte externo de luz natural (oficinas, colegios, edificios públicos, universidades,…). Son soluciones basadas en el aprovechamiento de la luz natural, minimizando el uso de la iluminación artificial, y consiguiendo un importante ahorro de energía (hasta un ~40 % de ahorro).
- En cuanto a los detectores de movimiento con ajuste de nivel mínimo para equipos 1-10Vcc y DALI, estos dispositivos son apropiados para su instalación en edificios y zonas como aparcamientos, hospitales, pasillos, almacenes, etc. Se trata de detectores de movimiento con tecnología de infrarrojos, que permiten fijar un nivel determinado de encendido mínimo (10 % ~50 %), lo que mantiene una iluminación residual en todo momento.
Ventajas de la regulación del alumbrado
Dinuy recuerda que los Sistemas de Regulación Automática para luminarias Led son dispositivos hacen posible la variación de luminosidad, de forma automática, con el fin de conseguir un ahorro energético, reduciendo el consumo de energía, y de aumentar el confort creando diferentes ambientes luminosos para cada ocasión.
Además, esta prestación lleva consigo una serie de beneficios menos obvios, pero igualmente importantes, como la mejora en la vida útil de las luminarias. La posibilidad de variar la luminosidad de forma automática permite aumentar el ahorro de energía, gracias a un uso racional de la iluminación en los edificios, e incrementar el confort, ya que el nivel de iluminación se adapta a las necesidades reales del usuario.
