El autoconsumo fotovoltaico, a pesar del Real Decreto aprobado, el potencial del vehículo eléctrico y el rol del instalador como empresa de servicios energéticos centraron las ponencias de la segunda jornada de este evento.
Las críticas a la regulación reciente del autoconsumo y a la actuación del ministro Soria concentraron buena parte de los comentarios y discursos en la primera parte de la jornada de clausura del XVII Congreso de FENIE, que tuvo lugar en Ávila el pasado 23 de octubre, y que contó con la asistencia de más de 200 empresarios.
“El autoconsumo es, ante todo y sobre todo, ahorro de energía”, la frase de Javier García Breva, experto en materia energética, resume el potencial que ofrece esta tecnología para las empresas y para la sociedad en general. Los participantes en esta mesa redonda concluyeron que, a pesar del denostado Real Decreto aprobado en junio de este año (que va en contra de las directivas europeas), este ámbito introduce vías de negocio para el instalador, como la inyección cero, que resaltó Pere Soria, de la firma Circutor, o trabajar en el exterior con estas soluciones. Francisco Paramio, presidente de FENIE, reclamó también que se habilite el balance neto y que no se penalice el almacenamiento de energía, así como la simplificación de los trámites administrativos.
En la mesa redonda dedicada a las infraestructuras de recarga para el vehículo eléctrico, se detallaron los pros y contras de la norma ITC-BT 52 y el crecimiento, todavía pequeño, pero cada vez más relevante de los coches eléctricos en el mercado. Arturo Pérez de Lucia, director gerente de AEDIVE, recalcó que la movilidad eléctrica está estrechamente ligada a la eficiencia energética, las energías renovables y el autoconsumo; además, señaló, las infraestructuras de recarga suponen una oportunidad para el instalador como prescriptor en este mercado.
En la charla coloquio que cerraba el congreso, se apuntó la necesidad de que el instalador se reinvente y busque alternativas: cooperar con otras empresas, especializarse o salir a mercados exteriores. “Somos empresas de servicios, imprescindibles en numerosos sectores”, señaló Tomás González, presidente del Gremio de Instaladores de Murcia, quien añadió que es preciso dignificar el trabajo del instalador más allá del precio.
