Las pequeñas y medianas empresas interesadas podrán presentar sus solicitudes en el plazo de dos meses desde el pasado 24 de noviembre. El programa incluye una auditoría de ciberseguridad y la implantación de un plan específico, entre otras medidas.
El Boletín Oficial del Estado publicó el pasado 24 de noviembre la Orden ICT/1093/2020, de 17 de noviembre, por la que se aprueban las bases reguladoras para la concesión de ayudas dirigidas a impulsar la aplicación de la ciberseguridad en las pequeñas y medianas empresas españolas en el marco del Programa Activa Ciberseguridad.
Tal y como se hace eco la Asociación de Fabricantes de Material Eléctrico (AFME), las ayudas consisten en la recepción de un asesoramiento especializado e individualizado que incluirá un diagnóstico de la situación de partida de la empresa beneficiaria, una auditoría de ciberseguridad, una propuesta de implantación del plan de ciberseguridad, así como el seguimiento de las medidas implantadas y valoración de otras actuaciones que sean necesarias.
Según subrayan desde AFME, un grupo de consultores especializados serán los encargados de prestar el asesoramiento a través de reuniones individualizadas con las empresas beneficiarias, que contarán con entre 10 y 20 horas de asesoramiento individualizado por cada empresa beneficiaria.
Podrán beneficiarse de estas ayudas cualquier mediana y pequeña empresa, independientemente de su forma jurídica, y siempre y cuando cumpla los requisitos expuestos en el artículo tres de la citada Orden ICT/1093/2020.
Las pymes interesadas podrán presentar las solicitudes en un plazo de dos meses a contar desde el pasado 24 de noviembre. Estas solicitudes deberán ir dirigidas a la Fundación EOI, se cumplimentarán por medios electrónicos y se acompañarán de la documentación necesaria, recogida en el artículo diez de la convocatoria.
