Los ponentes que participaron en este congreso CEVE 2019 concluyeron que el próximo año será clave en el desarrollo de la movilidad eléctrica, pero hay que combatir la ‘infoxicación’ y los falsos mitos, y se requerirá que Administración y empresas caminen juntas.
La quinta edición del Congreso Europeo del Vehículo Eléctrico – CEVE 2019, celebrada en Madrid los días 23 y 24 de octubre, puso de manifiesto que 2020 será el año de la movilidad eléctrica en España, tal como afirmó Arturo Pérez de Lucia, director gerente de AEDIVE, asociación que ha organizado este encuentro que congregó a expertos y empresas de toda la cadena de valor de este ámbito.
Y esto será así porque la Unión Europea ya ha fijado el límite máximo de emisiones de CO2 en 95 gramos de CO2 emitidos por cada kilómetro recorrido (95 gCO2/km) para el año 2021 a todos los vehículos, determinando que la tasa de 50 gCO2/km se considere como dos ventas de vehículos. Los fabricantes de automóviles han de ponerse a trabajar en este sentido si quieren evitar multas millonarias. Pérez de Lucia reveló que solo tres marcas en España cumplen ese ratio de 95 gCO2/km: Toyota, Smart y Tesla.
Pero además de sostenibilidad, la movilidad eléctrica también implica sobre todo eficiencia energética y ahorro de costes, mejora de la calidad del aire y generación distribuida, ya que a medida que crezcan el número de vehículos eléctricos en circulación (con todo lo que supone de miles de baterías disponibles) aumentará la posibilidad del llamado V2G, verter electricidad del vehículo a la red.
Infoxicación
El director gerente de AEDIVE denunció la ‘infoxicación’ y los falsos mitos que hay que combatir, como la autonomía del vehículo eléctrico, ya que a finales de este año o principios de 2020 habrá un mallado básico de carga rápida que eliminará la ansiedad de la autonomía, a lo que se une además que más del 80 % de la recarga se realiza en la vivienda (recarga vinculada). Añadió además que la evolución de la movilidad eléctrica será gradual.
Un proyecto de Estado coherente, un plan de inversiones para la industria de automoción, una reforma fiscal basada en el ‘quien contamina paga’, un programa de incentivos ambicioso y claro, y una revisión normativa enfocada a rebajar el término fijo de potencia son algunas de las demandas que Pérez de Lucia planteó en su intervención; “es necesario que Administración y empresas caminen juntas”.
Cabe destacar como sorpresa en el congreso, que en la jornada inaugural una niña de doce años puso voz a las futuras generaciones, reclamando un planeta más verde, habitable y sostenible, para lo cual la movilidad eléctrica es fundamental.
Futura Ley de Movilidad
Tras unas palabras de bienvenida de Adriano Mones, presidente de AEDIVE, en la inauguración también intervino Pedro Saura, secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, que comentó que la movilidad eléctrica tiene impacto en la productividad de la economía, en la lucha contra el cambio climática y en reforzar la cohesión social.
Saura desveló que el Gobierno en funciones está trabajando en una estrategia de movilidad segura, sostenible, compartida y conectada “que tiene que acabar en una Ley de la Movilidad”, dado que en este campo se requiere una gobernanza con la participación de varias Administraciones Públicas.
Asimismo, Pedro Saura remarcó que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) del Gobierno prevé contar con 5 millones de vehículos eléctricos para el año 2030.
