La asociación ASINEM organizó una jornada informativa el 26 de abril en la que denunció las dificultades para la gestión de conexiones a la red de distribución y el incumplimiento de plazos de la compañía. Denuncia también la situación de indefensión del usuario.
La Asociación de Instaladores Empresarios de Baleares (ASINEM) ha mostrado sus quejas sobre la tramitación y gestión de nuevas conexiones a la red por parte de Endesa Distribución. La entidad organizó el pasado 26 de abril una jornada informativa con asociados que contó con la presencia del director de Distribución, el responsable de Explotación, la responsable de Operaciones Comerciales de Red y el responsable de Gestión Comercial de Conexiones de la compañía eléctrica.
En esta sesión se informó que los únicos canales viables para las gestiones de conexiones a la red de distribución son un teléfono de tarificación especial y un correo eléctrico. “Ante la demanda del colectivo de facilitar un teléfono de atención gratuito, los representantes de la compañía distribuidora en Baleares indicaron que no depende de ellos, suponiendo un sobrecoste cada vez que necesitan llamar en representación de un cliente”, ponen de relieve desde ASINEM.
Además, sobre este mismo asunto los directivos de Endesa señalaron que “actualmente hay un grado de cumplimiento del 100% en los plazos de respuestas a las solicitudes de conexión”. Mientras que desde la asociación de Mallorca se sostiene que “este dato es totalmente falso y pretencioso, ya que se tiene constancia con casos reales en los que no se han cumplido estos plazos”.
Situación de impotencia de los consumidores
Asimismo, desde el colectivo de instaladores se demandó una mayor comunicación para el beneficio de los ciudadanos, que son los que sufren las consecuencias del mal funcionamiento de la distribuidora eléctrica. Para ello, se expusieron casos de suministros solicitados antes de comenzar la construcción de una vivienda y que, al terminar la construcción, todavía no estaban realizados los trabajos de extensión de red a pesar de ya haber sido pagados por el solicitante.
Insistiendo en la comunicación, los instaladores denuncian su situación de impotencia ante los clientes, ya que no disponen de canales de comunicación en los que poder solicitar información sobre el estado de las peticiones de suministro.
Finalmente, los instaladores reclamaron que los técnicos de Endesa que realicen inspecciones de instalaciones de clientes deban identificarse como trabajadores de la compañía y que, al finalizar la visita, dejen un informe con el resultado. A día de hoy, no existe ninguna constancia de estas visitas y el consumidor no dispone de comunicación alguna para demostrar que su instalación es correcta y puede conectarse a la red.
