El autoconsumo y los sistemas aislados de la red son los que avanzan en el sector fotovoltaico. Cabe resaltar que Extremadura y Murcia son los territorios que más producen y más capacidad fotovoltaica tienen, respectivamente.
El autoconsumo y los sistemas aislados de la red sin primas del Estado crecen en España, a pesar de la regulación desfavorable, lo que supuso el 79% de la nueva potencia fotovoltaica instalada el año pasado en España, según se desprende del Informe Anual de UNEF (Unión Española Fotovoltaica). Unos datos positivos que son realmente escasos si se comparan los 22 MW de nueva fotovoltaica instalada en nuestro país con los 40.000 nuevos GW instalados en todo el mundo en 2014.
El informe pone de manifiesto que las reformas emprendidas por el Gobierno con el cambio retroactivo del sistema de primas al de “costes estándares” no está garantizando la rentabilidad de las inversiones, como aseguraba, y está desincentivando la productividad de las instalaciones. La inseguridad jurídica ha situado a España como el país más demandado de Europa ante el CIADI y con más de 400 recursos abiertos en los tribunales nacionales.
Además, el cierre de empresas registrado el año pasado en España, la pérdida de 2.500 puestos de trabajo y la reducción de la producción fotovoltaica demuestran la ineficacia de la política energética del Gobierno, señalan desde UNEF.
Por otro lado, Extremadura y Murcia son los territorios que más producen y más capacidad fotovoltaica tienen, respectivamente. Debido a la ralentización del sector, el reparto de la potencia por comunidades autónomas durante los tres últimos años no ha sufrido prácticamente modificaciones. Andalucía, Castilla y León, Extremadura y Murcia se mantienen como principales regiones dentro del mercado doméstico.
En participación de la energía fotovoltaica por comunidades autónomas, el informe destaca de nuevo a Extremadura, que cubre una cuarta parte de la demanda energética con producción fotovoltaica interna.
